La Propiedad Intelectual se relaciona con las creaciones de la mente, tales como obras literarias y artísticas, libros, la música, la pintura, la escultura y las películas, etc,.
Solo hecho de su creación origina el derecho de protección, no obstante, a efectos de demostrar la autoría de los mismo será crucial el depósito a efectos de prueba.
Este tipo de creaciones pueden protegerse de diversas formas bien sea solicitando el registro ante los distintos organismos de la Comunidad Autónoma o a través de registros notariales, o plataformas privadas como Blockchain.
La propiedad intelectual se mantiene durante toda la vida del autor, hasta 70 años después de su fallecimiento, 50 años si se trata de programas de ordenador.